FUGA

Somos instantes, silencios
y compases de dos por cuatro.
A veces en el pentagrama equivocado,
a veces en la clave errónea,
pero siempre con la voluntad
de trascender,
de ser música,
de ser acorde unísono
o arpegio dilatado.
Con el deseo sublime
de ser belleza dentro del caos
que habita en nuestra mente.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.