¿Qué pasó en aquella plaza
Pétrea y vivaz?
Era tu calor insinuado,
Mi soledad foránea
O el sol tibio de noviembre.
Bernini y Miguel Ángel no vigilaban
Pero eran cómplices de piedra
Nuestra impudicia no fue grata
A todos los ojos.
Fuimos forzados al exilio
Dentro del exilio anterior.